El estrés se desencadena cuando nos dejamos llevar por emociones fuertes. El desafío diario de tratar efectivamente con las emociones es fundamental para la condición humana porque nuestros cerebros están programados para darle la ventaja a las emociones.
El lugar de trabajo es un área rica en la manifestación de emociones humanas, tanto positivas como negativas. Y muchas emociones surgirán cuando nos encontremos en una situación estresante. Entonces, en el continuo del estrés, ¿te reconoces a ti mismo como tolerante o intolerante al estrés?
TOLERANCIA AL ESTRÉS CONTINUA
Tolerante al Estrés: componerse sin dejarse llevar por emociones fuertes y confiar en tus propias habilidades para superar la situación.
Intolerante al Estrés: rendirse a sentimientos de impotencia y desesperanza mientras se siente un impacto en las funciones mentales y corporales.
Consejo: sigue el proceso de tres pasos de la “Envoltura de Confianza” para recuperar una postura más tranquila:
- Planifica un curso de acción positiva: para limitar y contener el estrés.
- Mantén una actitud optimista: frente a cambios repentinos y experiencias negativas.
- Siente que tienes control o influencia: sobre los eventos que inducen estrés.
Desarrollar la capacidad de tolerar el estrés puede ofrecer amplias ventajas para tu salud física y mental, así como para tu crecimiento personal y profesional. Utilizando técnicas de inteligencia emocional, puedes cultivar las habilidades necesarias para gestionar el estrés de forma eficaz, lo que se traduce en una mayor resiliencia, un mejor rendimiento y un bienestar general.
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